Algo que sin duda es/fue/será tema para absolutamente todas las mujeres, es el de los anticonceptivos. Cuando yo empecé a tomarlos, subí como 2 kilos en un mes y me salieron espinillas. Y peor a todo eso, era que siempre se me olvidaba tomar a la hora en que había que tomarlo. Porque claro, no es sólo asumir que puede que le pasen cosas a tu cuerpo, como subir de peso y llenarte de granos que antes no tenías, sino que además tienes que tener un método de alarma para acordarte, pagarlos cada mes y esperar que tus “ganas de» no se vean perjudicadas. Y sí, es verdad que tenemos la opción de probar distintos métodos y marcas hasta llegar al que nos sirva, pero… puede ser eterno el proceso.
Así es este mundo de las mujeres que toman anticonceptivos y siempre me he preguntado… ¿cómo no puede existir un método en el mercado para los hombres? Algo mucho más simple que la vasectomía (que pocos quieren hacerse), algo que sea como tomarse una pastilla, tal como lo tenemos que hacer nosotras. Tener un útero… ¿tiene que ser tan injusto?
Y hoy en la mañana me desperté, y como todos los días, me dediqué a vitrinear las noticias en el mundo de twitter. Y en la revista Muy Interesante había un artículo que hablaba sobre este nuevo hallazgo de la ciencia, un verdadero festín para las mujeres que no soportan tener que tomar anticonceptivos: por fin uno para los hombres, que además es seguro y reversible.
Se trata de un gel inyectable que descubrieron un equipo de investigadores de la Universidad de Illinois en Chicago, EEUU, que está en etapa de estudio aún pero los resultados han mostrado buenos resultados en un estudio con conejos (tampoco me gusta que prueben con animales pero el estudio no lo hice yo) y a finales de este año se empezará a probar en hombres. Lo que hace este gel es que no existan espermatozoides en el semen.
Y, tal como dice el reportaje, teniendo en cuenta que hay cada año hay 85 millones de embarazos no deseados en el mundo, es hora de que hombres y mujeres, tengan algo que hacer – y decir – en este tema.