Seguro estas 7 cosas te dejarán pensando en lo afortunada que es tu vida
Ser agradecido en la vida es un acto de bondad, de empatía, de ser capaz de ver lo que uno tiene y de festejar tanta buena suerte – aunque haya días en que pensemos que no la tenemos -. Todos los días nos pasan y vivimos cosas que debiesen hacernos sentir felices y agradecidos porque tenemos un día más de vida para disfrutar todo lo que hay por explorar, todo lo que nos hace bien y todo lo que nos hace suspirar.
Familia
La familia a la que queremos, es sin duda algo por lo que debiésemos agradecer. Nos acompaña, nos apoya,
nos sigue en nuestro camino para siempre.
Hijos
Tener la oportunidad de tener a un hijo es algo que es de las cosas más maravillosas que nos ocurrirán en
nuestra vida. Poder abrazarlo, llenarlo de besos y sentir ese cariño tan especial que nos dan, es algo que no se puede dejar de agradecer.
Salud
Nuestro cuerpo es nuestro templo. Me encanta esa frase porque es la pura y santa verdad. Y tener una buena salud que nos acompañe, es algo increíble y que merece que demos las gracias todos los días por tener uno nuevo que empezar.
La oportunidad de seguir sorprendiéndonos con la vida
Todos los días tienes la oportunidad de abrir los ojos. Pero abrirlos bien. Si te concentras un poco en lograr
impresionarte con algo, así será: un atardecer, un amanecer, el movimiento de la luna por encima de tu
cabeza, la sonrisa de un desconocido, la ayuda de un compañero de trabajo, una flor que creció donde ya no había posibilidad de vida. Todos los días hay pequeñas cosas que nos dan la oportunidad de volver a
sorprendernos. Y hay que dar gracias por eso.
Un trabajo
Tener un trabajo es algo bueno. Te permite llegar a fin de mes con lo que necesitas. Tal vez no te gusta tu jefe o lo que haces, pero al menos tienes un trabajo que puede ayudarte a saltar un paso más allá para seguir con eso que tanto quieres.
Una sonrisa
Poder encontrar una sonrisa, siempre mejorará el día. Y como a veces cuesta mucho que saquemos sonrisas, cuando efectivamente ocurra una, acuérdate de lo bien que se siente. Especialmente una buena carcajada.
La gente que nos quiere
¿Cómo no agradecer tener personas que nos quieran en nuestras vidas? De esos sí que somos afortunados.
Seguro que todos los días hay algo que nos pasa, que sentimos, por lo que podemos dar las gracias.
Y si eso nos hace bien, ¿por qué no hacerlo todos los días?