El hombre que domó a los buitres

Hay algunos espectáculos de la naturaleza que solo se dan en lugares precisos. Por ejemplo, si uno quiere ver auroras boreales, se va al polo norte y sus países vecinos. Si quiere observar leones, jirafas y elefantes en plena libertad, tendrá que irse de safari a Kenia. Pero si lo que quiere es ver de cerca de unos de los animales más asustadizos e intrigantes de la naturaleza, como lo es el buitre, solo podrá hacerlo en el Mas de Bunyol, perdido en los Puertos de Beceite, cerca de Valderrobres (Aragón-España).

Resulta que José Ramón, bautizado como El Buitre Man por National Geographic, consiguió lo que nunca nadie había logrado antes: domar a los buitres. Si tienen la inmensa suerte de asistir al “espectáculo”, se darán cuenta de que no vinieron a ver animalitos realizando alguno que otro truco que les enseñaron. Los buitres son fascinantes. Tienen facultades absolutamente únicas. Son capaces de detectar olores a mas de 2 kilómetros, comer carne podrida, incluso contaminada por la gripe porcina, sin que les pase absolutamente nada. Algunos dicen que… ¡incluso resisten al ántrax! Viven en la cúspide de la cadena alimenticia, pero no tienen defensa propia, por lo que en la naturaleza se hace imposible acercarse a alguno para observar lo majestuosos que son.

Lo cierto es que todos tenemos una imagen preconcebida, de cómo son los buitres: feos, de cuello largos y calvos. Sin embargo, al verlos en realidad, uno se da cuenta que son espectaculares. Lo primero es su tamaño: ¡son inmensos! Verlos desplegar sus alas te deja con la boca abierta. También es fantástico ver como toman vuelo y desafiar el peso de sus cuerpos con enorme fuerza. Tampoco deja de ser maravilloso verlos planear y subir siguiendo las corrientes de aires, hasta alcanzar alturas inimaginables.

Si contactan al Buitre Man y agendan una visita, tendrán que cumplir con una seria de precauciones:
  • No ponerse ningún tipo de perfume, ya que lo detectarían los buitres y no se acercarían.
  • Tampoco podrán hablar, escuchan a kilómetros de distancia.
  • Y para llegar al observatorio, tendrán que caminar. Acercarse en auto haría desconfiar a los buitres.
  • Si van con niños (nosotros fuimos con las nuestras), tendrán que hacer todo lo posible por mantenerlos en silencio.
  • Se recomienda usar ropa oscura.
  • Se prohiben los flash.
  • Deben cumplir con el horario, que es sagradamente todos los días a las 9 am.

Una vez ahí, se instalaran a dentro de una casita con vista panorámica. Detrás de un ventanal y con altavoces reproduciendo todo lo que ocurre a fuera, verán como José Ramón lleva carretillas de comida (llenas con restos de los mataderos) y como de repente llegan 100, 200… ¡hasta 300 buitres desde arriba de las cimas para comer! Para lograr este resultado, José Ramón tardó más de 2 décadas. Eso es lo impresionante. Venía cada día a dejarles comida en el mismo lugar. Después de algunos años, los buitres toleraron que él estuviese presente mientras almorzaban. Ahora, con solo verlo, ya llegan y se intalan esperando a que les sirvan la comida. Si él no estuviera, o si viniese otro, los buitres no bajarían. Si están comiendo y escuchan un ruido, huyen volando. Su boliche ya se hizo famoso entre los rapaces. Los más expertos, podrán detectar que algunos buitres vienen desde los pirineos e incluso, algunas veces llegan desde el norte de África.

A primera vista, no parece un panorama del todo encantador, sin embargo es un espectáculo que los dejará boca abiertos. No es por nada que National Geographic vino hasta dos veces, para hacer reportajes sobre el Buitre Man y sus rapaces! Y llegan de todo el mundo, biólogos, fotógrafos y amantes de la naturaleza.

Datos de visita :
  • La visita guiada se realiza una vez al día, los 365 días del año, a las 9 am desde el observatorio. La visita dura 2 horas aprox.
  • El valor de la entrada para un adulto es de 13 euros. Los niños pagan 7 euros (4 – 11 años). Hay tarifas para grupos, que deben preguntarles directamente a ellos.
  • Para reservar, contacten por telefono al +34 677 174 845 o por mail info@masdebunyol.com
  • Para mas info, visitenlo en su página web o en Facebook.

José Ramón, el Buitre Man

El Observatorio

¡Los buitres llegan a comer!

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