1. La genética : buscar variedades adaptadas al clima local
  2. El sol : 5 horas de sol directo mínimo.
  3. La tierra : trabajar con una tierra de calidad.
  4. El agua : 3 litros diarios por metros cuadrado mínimo.

Tener una huerta es mucho más que cosechar tomates o lechugas. Al cultivar nuestra propia comida, se establece un lazo con la tierra que muchos habíamos perdidos. No los quiero enganar, fructificar un pedazo de tierra para alimentar a su familia requiere mucho trabajo. Uno podría creer que el hombre es capaz de domar la naturaleza pero la realidad es que nos tenemos que adaptar a ella. 

Aquí no vamos a hablar de cultivos intensivos que producen grandes cantidades de verduras, sino de como reproducir la armonía que existe en la naturaleza. El concepto de permacultura traduce la idea de pedirle a la tierra solo lo que nos puede dar. Eso significa observar y comprender como interactúan las especies entre ellas, sean vegetales o animales. Pero antes de entrar en el mundo del cultivo razonado es importante poner las bases comunes a cualquier cultivo. 

1. La genética :buscar variedades adaptadas al clima local

Para empezar, hay que preguntarse cuáles son la plantas que crecen en la zona donde van a cultivar. Por suerte la mayoría de las verduras comunes crecen fácilmente bajo cualquier clima, pero elegir variedades autóctonas y adaptadas al clima local es la mejor manera de asegurar el éxito del cultivo. 

2. El sol :5 horas de sol directo mínimo

Una vez seleccionadas las variedades, tendremos que buscarles el lugar adecuado a su crecimiento. La regla es básica: las plantas necesitan sol y en cuanto más, mejor! Eso si, es importante recalcar que el calor puede llegar a ser un problema, ya que arriba de 28 grados el crecimiento y el desarrollo de las plantas se verán pausados e incluso, detenidos. Así pues, si la zona de cultivo está situada en un lugar muy caluroso habrá que procurar sombra durante las horas más calurosas del verano. 

Una planta necesita un mínimo de 5 horas de sol directo, por lo que descarten hacer su huerta debajo un árbol o en la esquina de una terraza. Si tienen que elegir entre sol de la mañana y sol de la tarde, siempre elijan el primero ya que durante las noches aumenta la humedad y el sol de la mañana secara las plantas limitando así el desarrollo de enfermedades. 

3. La tierra : trabajar con una tierra de calidad

Después de la genética y del sol, lo mas importante es la tierra. Existen varias técnicas para saber las características de la tierra y ya volveremos sobre ello. La idea es que sin un buen substrato no obtendrán ningún resultado. Por ejemplo, si viven en condominio lo mas probable es que la tierra de su patio sea de relleno por lo que será muy pobre y habrá que enriquecerla y mejorarla. Es un proceso que requiere tiempo por lo que si quieren partir de inmediato tendrán que comprar tierra de buena calidad.

4. El agua : 3 litros diarios por metros cuadrado mínimo

El último aspecto puede ser el más importante: el agua. Lo primero es tener una fuente de agua cerca del cultivo ya que un solo metro cuadrado de huerta necesitará al menos 3 litros de agua diario. Sea la que sea su fuente de agua y al igual que la tierra, su calidad es fundamental para el éxito de su cultivo. Un test de PH es lo mínimo que deben hacer y éste deberá situarse entre 6 y 7,5 para asegurar una buena asimilación de los nutrientes. Cuidado, si tienen un ablandador en su casa descarten el uso de esta agua. El sodio contenido en ella se irá acumulando en la tierra hasta que no pueda usarse. 

Esperamos que con esto se motiven a comenzar su huerto, estamos aquí para ir acompañándolos en el camino. Tener una huerta es como tener un nuevo miembro en la familia y requiere de mucho cuidado, pero también da una sensación de amor enorme.

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