Todos los años, el 23 de abril se celebra el Día del Libro. Aquí te contamos por qué.
Cada 23 de abril, se celebra en el mundo entero el Día del Libro. UNESCO eligió esta fecha, porque coincide con la muerte de grandes escritores, como Miguel de Cervantes y el poeta Garcilaso de la Vega, El Inca, además de ser la fecha de nacimiento de autores, como Maurice Druon, K. Laxness, Vladimir Nabokov, Josep Pla y Manuel Mejía Vallejo. Este día busca rendirle homenaje a libros y autores, transmitiendo el poder de los libros y amor por la lectura.
¿Dónde comenzó a celebrarse este día?
Todo comenzó en Cataluña, donde desde la Edad Media, cada 23 de abril, celebran la fiesta del patrón de Catañula, llamado Sant Jordi (San Jorge), y se entrega una rosa y un libro como tradición.
La historia cuenta que Sant Jordi estaba bajo las órdenes del emperador Diocleciano, y se negó a seguir la orden de perseguir a los cristianos, por lo que fue martirizado y decapitado. Y las personas comenzaron a venerarlo como mártir y enseguida aparecieron historias fantásticas.
En el siglo XV ya se organizaba en Barcelona una feria de rosas con motivo de Sant Jordi. Acudían sobre todo novios, prometidos y matrimonios jóvenes, y eso hace pensar que la costumbre de regalar una rosa tiene el origen en esta fiesta, que se celebraba en el Palau de la Generalitat.
Aunque la fiesta se celebraba con más o menos intensidad o menos desde el siglo XVI, es a finales del XIX, con el movimiento político y cultural de la Renaixença, cuando se instauró Sant Jordi como la festividad patriótica, cívica y cultural más celebrada en Barcelona y en Cataluña.
En 1929, durante la Exposición Internacional de Barcelona, los libreros decidieron organizarse y salieron a la calle a montar chiringuitos para presentar novedades y fomentar la lectura. La iniciativa tuvo tanto éxito que se decidió cambiar la fecha y se estableció como Día del Libro el 23 de abril, día que coincide con la muerte de dos grandes autores de la historia de la literatura: Cervantes y Shakespeare.
Mitos & Leyendas de Sant Jordi
Se dice que en la villa de Montblanc había un dragón terrible que causaba estragos entre hombres y bestias. Para contenerlo, escogían por sorteo a un habitante y lo daban al monstruo para que lo devorara. Un buen día, le llegó el turno a la hija del rey, que habría muerto a manos de la fiera si el caballero Jordi no hubiera aparecido para enfrentarse al dragón y matarlo, y es con esa sangre de dragón, que nació un rosal de flores rojas.
¿Sabías que…?
Además, cada 23 de abril, en Cataluña se celebra el día de los enamorados, una festividad donde las parejas se regalan una rosa y un libro.
¡No perderse!
Si están en Barcelona, no olviden pasar en esta fecha, a La Rambla, que es el principal punto de encuentro, que se llena a rebosar con puestos de libreros y floristas.
Fotos de la nota por @findmeasgabby y @atiliobermudez, desde Barcelona